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MINERÍA CRIPTO EN MÉXICO
La minería de criptomonedas en México vive un momento clave. Con mayor fiscalización, costos energéticos al alza y presión geopolítica sobre los componentes importados, minar en territorio nacional es viable pero requiere planeación estratégica. Esta guía profunda cubre desde los fundamentos técnicos y económicos, hasta cómo cumplir con el SAT y maximizar tu eficiencia. Exploramos herramientas, ejemplos reales, tendencias energéticas, impacto de los aranceles, y todo lo necesario para que evalúes con claridad si este modelo de ingreso tiene sentido para ti en 2025.

Estado actual de la minería cripto en México
En abril de 2025, México mantiene un papel secundario pero creciente en la minería de criptomonedas a nivel global. Aunque países como EE.UU., Rusia, Irán y Kazajistán dominan por sus ventajas en electricidad y política energética, México presenta un ecosistema emergente con mineros individuales, granjas medianas y un ecosistema de soporte en expansión. La legalidad, el interés tecnológico y el potencial de energías renovables juegan a favor. Pero también hay fricciones: los aranceles impuestos por EE.UU. encarecen hardware, la electricidad no es tan barata como en otros países mineros, y el SAT ya exige declarar ingresos por minería.
El contexto energético también importa: la tarifa DAC (alto consumo doméstico) es de aproximadamente 1.5 MXN por kWh, lo que representa un reto operativo para quienes usan ASICs de alto consumo. Aun así, muchas iniciativas están surgiendo para usar paneles solares en estados como Sonora, Chihuahua y Yucatán, donde la radiación solar es óptima y la instalación puede amortizarse en menos de tres años.
Factores clave en el entorno actual
Mayor fiscalización por parte del SAT: ya se exige declarar ingresos por minería como actividad empresarial.
Aranceles del 25% a productos electrónicos encarecen los ASICs importados desde China.
Costo de electricidad en México, aunque menor que en Europa, sigue siendo un reto frente a competidores internacionales.
Avances en adopción de energía solar como estrategia de reducción de costos.
Mayor actividad de comunidades locales, como #TRMX y foros especializados en Telegram.
En resumen, el mercado mexicano no está saturado, pero tampoco es “fácil”. Requiere inteligencia operativa, seguimiento legal y visión de largo plazo para que la minería sea más que una moda pasajera.
Cómo empezar a minar criptomonedas en México
Comenzar en la minería cripto en México en 2025 implica analizar variables técnicas, financieras y fiscales. El primer paso es elegir qué criptomoneda vas a minar. No todas son rentables, ni accesibles. Bitcoin, por ejemplo, requiere ASICs con alto consumo eléctrico y un costo de entrada elevado. En cambio, monedas como Ravencoin, Ethereum Classic o Monero pueden minarse con GPUs que requieren menor inversión inicial y menor consumo energético.
Para evaluar la rentabilidad, herramientas como WhatToMine te ayudan a comparar monedas según tu hardware. Luego viene la parte del hardware: en México puedes adquirir equipos por Mercado Libre, Amazon, o importarlos directamente. Ten en cuenta los aranceles, costos de envío y tipo de cambio. Por ejemplo, un Antminer S19 puede costar entre 40,000 y 100,000 MXN dependiendo del proveedor y el momento de compra. Las GPUs como la RTX 3060 rondan entre 6,000 y 15,000 MXN por unidad.
Guía paso a paso para comenzar
Investiga qué moneda se adapta a tu presupuesto, conocimientos y consumo eléctrico local.
Adquiere hardware compatible: ASICs para BTC, GPUs para monedas PoW alternativas.
Acondiciona tu espacio: buena ventilación, protección contra sobrecalentamiento y monitoreo 24/7.
Instala software de minería y únete a un pool como F2Pool, Hiveon o SlushPool.
Calcula el costo mensual de electricidad, mantenimiento e internet para estimar tu rentabilidad real.
Además, debes gestionar correctamente tus ingresos. Usa billeteras seguras (MetaMask, Ledger, Trezor), lleva un registro preciso de tus recompensas y declara ingresos si superan los umbrales establecidos por el SAT. Los ingresos netos están gravados al 10% bajo régimen empresarial, según la legislación vigente.
Ejemplo real: minería de Bitcoin en México
Inversión inicial: 50,000 MXN en equipo + 5,000 MXN en ventilación y accesorios. Consumo diario: 78 kWh x 1.5 MXN = 117 MXN/día, es decir 3,510 MXN/mes. Recompensa mensual estimada: 0.0005 BTC/día = 18,000 MXN. Ganancia mensual neta: 18,000 - 3,510 = 14,490 MXN. Tiempo estimado para retorno de inversión: 3.8 meses (sin considerar volatilidad).
Este cálculo es optimista. Factores como el halving, la subida en dificultad o el cambio en tarifas eléctricas pueden alterar dramáticamente el retorno. El análisis previo y el monitoreo constante son esenciales.
Rentabilidad, energía y futuro regulatorio
La rentabilidad de minar criptomonedas en México está estrechamente ligada al costo operativo, principalmente la energía. En este sentido, los mineros mexicanos enfrentan desventajas respecto a países con subsidios energéticos. Sin embargo, el uso de energías renovables, como la solar, está ganando fuerza. Paneles solares en regiones como el norte del país pueden reducir los costos mensuales a menos del 50% de lo que paga un usuario DAC. Esto mejora sustancialmente el margen de utilidad a mediano plazo, aunque requiere inversiones iniciales de entre 50,000 y 100,000 MXN.
En el ámbito legal, la minería es legal pero está bajo vigilancia. El SAT exige que se reporten las ganancias como ingresos por actividad empresarial. Además, se han registrado esfuerzos por parte del Banco de México y la Comisión Reguladora de Energía para monitorear el impacto de estas operaciones en el consumo energético nacional. Las próximas reformas podrían incluir un registro obligatorio para granjas, nuevos impuestos ecológicos o restricciones para operar con CFE en ciertas zonas.
Tendencias y desafíos clave a futuro
Mayor presión fiscal: el SAT podría exigir retenciones automáticas en plataformas cripto o nuevos CFDIs para recompensas.
Costos de importación elevados por aranceles de hasta 25% en equipos mineros provenientes de Asia.
Proliferación de energía solar y almacenamiento off-grid para reducir costos fijos.
Desigualdad en conectividad: zonas urbanas tienen ventaja operativa sobre regiones rurales.
Mayor adopción de criptomonedas en el sector empresarial que podría impulsar servicios legales para minería.
Para quienes están considerando entrar, el consejo es claro: haz simulaciones de rentabilidad realista, contempla todos los costos, y mantente informado sobre regulación. Minar ya no es tan “casual” como en 2017. Es una inversión seria que puede rendir frutos, pero solo si se hace con enfoque profesional y compliance legal.
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